Tras un mes de marzo atípico y descontrolado, no sé cómo
llamarlo, vuelvo a hablar en este blog. Marzo siempre ha sido para má un mes
muy especial, se recibe todo lo bueno cosechado en esos entrenos invernales, no
tengo ningún problema relacionado con la alergia, el terreno está en ese punto
medio de humedad del invierno y sin llegar a la sequedad de los meses
venideros.
Pero este año….. no veas…. Tras una ABR durísima de
climatología, el mes sigue peor, agua, nubes, más agua, barro, viento, …. Día tras día y sin un respiro,
desgastándote y limándote físicamente y mentalmente, hasta llegar a un
punto en el que este mes ha sido lo
totalmente opuesto a lo que yo espero de él.
Ha sido un mes plagado de pruebas, todas con un significado
especial:
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Empezamos con Valverde, primera maratón que se
corrió en un provincial de Huelva en el año 2006 y primer maratón en la que
conseguía la victoria.
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Silves, circuito mítico que acogió una copa del
mundo en los años 90, con Cadel Evans como ganador y un servidor deseando
correr algún día en ese escenario.
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Albolote, prueba que dispute hace exactamente 10
años y que supuso la finalización de la primera Copa Andalucía que seguía al
completo (con sus 8 pruebas).
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Por ultimo Jerez, una de las catedrales del MTB
andaluz, cerca de 20 años de historia y además la vuelta del Open de España a
Andalucía.
Todo esto me decía a mí mismo, “macho, al final va a llevar
razón JARG de que soy un abuelo”.
Hablando con los corredores junior y cadete, veo que ellos en esos años
o no habían nacido o estaban todavía en la guardería, o ver la parrilla junto
con chavales que en esos años te veían correr tras la carrera de escuelas.
Pero bueno, de nuevo la edad y experiencia me ayuda una vez
más para volver allegar a una meta y decir “todavía estoy aquí, y hay que dar
pedales para ganarme”. A lo largo de toda mi carrera deportiva he sufrido
muchos momentos, de éxito total y de euforia, así como momentos sin sentido
llenos de negatividad y buscando la salida de un posible abandono.
Tanto en el entrenamiento como en la competición esto es el
pan nuestro de cada día, no podemos pensar de que siempre se tiene que estar
arriba, es una utopia inalcanzable. Solo tenemos que volver a mirar a los
deportistas de elite, Nadal, Alonso, Carlos Sainz, los grandes equipos de
futbol, … cada uno en su nivel ha tenido que pasar por momentos de éxito y por
momentos frustrantes y negativos.
Tras la ABR mi cuerpo dijo basta, 5 días de fiebre enfermo
me hicieron parar en seco una semana completa.
Volviendo a los entrenos para la semana previa a Valverde. Tras esto
llegas con una duda de cómo vas a solventar una prueba de este calibre,
pero el gran ambiente de la prueba y el
cariño que te da el provincial de Huelva me hacía superar todas esas dudas.
La mejor defensa un buen ataque, si le ofreces dudas a tus
rivales, estos se van a aprovechar, y así, aunque no tenía un buen día de
inicio, decidí atacar sin parar en Valverde. Mi hermano me conoce bien y sabe
cómo manejarme en este contexto y aguanto sin problemas la rueda, pero también
Javier Ramirez (exprofesional de
carretera que también ha sucumbido a los encantos del MTB). Ritmo sin parar,
subiendo y bajando a bloque con tal de descolgarlo, pero no pudo ser, y en el
momento en que me vino un poco de debilidad, este ataco y no pude hacer nada.
Muy contento en meta por cómo había afrontado la carrera y el buen resultado,
con ganas de afrontar los próximos retos.
En Silves la mala suerte me volvió a fastidiar una prueba
UCI, circulando en 6ª posición mi patilla de cambio no quería trabajar más ese
día, así que para la grada a animar a bloque a mi hermano y Diego que estaban
haciendo un carrerón. Veo más carreras desde la grada que me gustaría, pero
aprendo muchísimo a pesar de los años viviéndolas desde fuera. También os
recomiendo alguna vez visitar Portugal para participar en una prueba,
impresionante el cariño con que los lusos viven este deporte, tanto a nivel
organizativo como de afición.
El tiempo seguía fastidiando horarios de entrenos y de
clases en el trabajo, mi cabeza estaba dando más vueltas de la cuenta y cada
vez que cojo la bici es para mojarte, pasar frio o embarrarme hasta las orejas
(y no me gusta naaaaadaaaa). Veo la página del tiempo.es 20 veces al día y más
me deprimo….
Llega Albolote, sábado por la tarde de locos, sol y circuito
muy divertido, me lo paso genial con la bici y cargo las pilas para la carrera
(otra vez para arriba). Pero el Domingo???
Ambulancia con mi amigo Gaso para el hospital, lluvia y ríos corriendo
por el circuito, caras de poca diversión y miedo en algunos. Lo siento pero no
corro, mi mentalidad no está para el nivel de exigencia que me pide la prueba,
físicamente CREO que estoy bien (aquí estoy empezando a venirme abajo también)
pero la cabeza es nuestro verdadero motor, y este caso había cogido perla.
Tras esto días de desilusión, de pensar demasiado, de volver
a mirar el tiempo.es, jeje, salir a entrenar y solo fijarte en lo negativo,… o
ya está bien. Me pego dos buenas guantadas, y que ye hemos pasado por aquí
Javier. Sale el SOL, a tope entrenando, escuchas a los que te quieren y vas
para arriba, lo que no te mata te hace más fuerte, … así nos presentamos en
Jerez.
La catedral, circuito de los míos, ambiente impresionante,
caras de alegría alrededor, … esto es lo que todos necesitábamos. Me da igual
la posición de salida, que no se pueda adelantar que los chavales estén muy
fuertes y estén entrenando más que tú, estoy aquí y hay que ganarme.
Salida penosa y utilizo mi mala leche para adelantar por
donde no se puede, la gente anima sin parar, conozco a muchos en el público y
me da mucha alegría de que estén ahí apoyando a la prueba y a los corredores. Remonto
sin importarme el puesto o lo que me llevan los de delante, lo estoy dando todo
y no me puedo recriminar nada.
Flipo con mi nueva bici, cada vez más a gusto, derrapo,
salto y hago cosas como un juvenil (si me viera mi padre…). Al final llegada a
meta, brazo en alto, he ganado mi carrera hoy, luchaba contra mi peor rival: yo
mismo, otra vez estoy. JARG me recibe y me dice “muy buena otra vez abuelo (de
elite claro esta)”.
He escrito todo esto intentando trasmitiros mi felicidad por
volver a estar en el punto que todo deportista quiere estar, motivado, con fuerza, energía,… volverán esos momentos malos, pero los superare de nuevo, seguro.